Las micropigmentaciones o el maquillaje permanente simplifican enormemente la vida de una mujer moderna. Hoy en día no es necesario dedicar tiempo extra a dibujar cuidadosamente el contorno de las cejas o los labios. Basta con someterse a un procedimiento y las cejas recobrarán con una bonita forma y un color vivo. Pero, ¿qué se puede hacer si el tatuaje cosmético no se realizó adecuadamente y es necesario deshacerse del maquillaje permanente? La tecnología láser viene al rescate.
La eliminación con láser de tatuajes y micropigmentaciones es la forma más moderna de deshacerse permanentemente de una imagen no deseada o de unas cejas mal hechas. Antes, para eliminar un tatuaje de la piel había que utilizar métodos mecánicos o químicos de destrucción de la piel pigmentada, que dejaban cicatrices y marcas desagradables. Por lo tanto, era imposible deshacerse del tatuaje de cejas o labios. Hoy, sin embargo, la tecnología láser permite eliminar un tatuaje de la cara o el cuerpo sin dejar rastro.
Para eliminar tatuajes, los cosmetólogos pueden utilizar láser de rubí, alejandrita o diodo. Pero el más eficaz es el láser de neodimio, debido a la alta velocidad de formación de pulsos que tiene un impacto negativo mínimo en la piel. Los rayos infrarrojos del láser de neodimio afectan más eficazmente a todos los pigmentos de la pintura, independientemente del color y del tipo de piel.